Beneficios de un edificio certificado WELL: ¿Cómo medirlos?

¿Cuáles son los beneficios de un edificio WELL?

Invertir en WELL es invertir en las personas. Suponiendo el caso de un edificio de oficinas hay que tener en cuenta que, en una empresa tipo, el gasto en personal supone, de media, el 90% del total. Invertir en la salud y el bienestar de las personas significa, invertir en el principal activo que tienen la mayoría de empresas. Un entorno de trabajo saludable permite a la compañía atraer y retener talento, aumentar el valor del inmueble, liderar el sector y contribuir a la salud y bienestar de los empleados. Desde el punto de vista del trabajador, estas condiciones ayudan a mejorar la satisfacción en el puesto de trabajo y la productividad.

Costes de operación de una empresa tipo

Una oficina con un nivel de bienestar insuficiente o mediocre conlleva una serie de gastos para la empresa:

  • Algunos son costes directos, se trata de gastos que implican una causa efecto mucho más directa y clara: aumento del absentismo, del presentismo, de las bajas médicas, gastos en seguros médicos y otro tipo de gastos derivados.
  • Otros, en cambio, son indirectos o costes ocultos. Se denominan así porque las consecuencias tardan más en visualizarse pero también suelen ser problemas con consecuencias mayores: un nivel inadecuado de bienestar en el puesto de trabajo repercute en el compromiso de los trabajadores con la empresa, esto puede desembocar en retrasos en entregas, contar con un exceso de personal debido a la productividad insuficiente, inconveniencia por parte de los clientes ante empleados no motivados y, en última instancia, reducción del volumen de negocio.
Costes directos y costes ocultos de un espacio con bienestar insuficiente

Es por ello que las medidas enfocadas al bienestar tienen una presencia mayor cada día en las empresas:

  • El 49% de las empresas con sede en EEUU dicen que los programas de salud y bienestar son esenciales para la estrategia de la empresa.
  • El 50% de las empresas de los EEUU con 50+ empleados ofrece iniciativas de promoción del bienestar.
  • Dentro de los próximos 3 a 5 años, podemos esperar que el 99% de los empleadores ofrezcan programas de mejora de la salud y el bienestar.
  • El 62% de los propietarios ve un impacto positivo en la satisfacción del ocupante y el 79% aprecia un impacto positivo en el valor del edificio.

En conclusión, un edificio WELL aporta beneficios tanto a los trabajadores como a la empresa:

  • Ambiente centrado en la salud: esto supone un aumento de la satisfacción y la felicidad en el trabajo.
  • Aumento de la productividad derivado del aumento del bienestar y la capacidad de concentración.
  • Retorno de la inversión.
  • Capacidad de atraer y retener el talento.

¿Cómo medir el impacto?

Conocidos los beneficios que aportan las medidas la pregunta es: ¿Cómo podemos medir este impacto? Los beneficios son muy relevantes, aunque no son inmediatos, sino que se obtienen con el tiempo. Para medir el impacto correctamente se debe comparar la situación previa y posterior pasado un tiempo. Según el reciente estudio elaborado por Cushman & Wakefield, la implantación de medidas WELL en edificios de oficinas tienen el siguiente impacto:

  • Reducción del absentismo laboral en un 37%
  • Aumento de la productividad en un 21%
  • Aumento de la satisfacción del cliente en un 10%

A continuación, se muestran una serie de casos de éxito; todos tienen en común que se certificaron WELL en 2017 y que se analizaron los datos un año después de la inauguración del edificio:

ASID Headquarters

El edificio de la American Society of Interior designers se certificó WELL Platinum en 2017. Tras un año de uso, las principales conclusiones fueron las siguientes:

  • Los niveles de CO2 se redujeron en un 58%
  • El absentismo laboral se redujo en un 19%
  • Reducción del presentismo: los trabajadores afirman aprovechar el 90% de su tiempo, esto supone un aumento del 16%
ASID Headquarters. WELL Platinum 2017

JLL Shanghai

El edificio de JLL en Shanghai se certificó WELL Platinum en 2017. Tras un año de uso, los principales cambios fueron los siguientes:

  • El 92% de los empleados se siente orgulloso de sus nuevas oficinas. En este caso vemos que hay aspectos que son subjetivos, como es el orgullo que produce un edificio al trabajador, pero que son enormemente importantes, ya que contribuye a la moral y a la felicidad de las personas.
  • Las bajas laborales se redujeron en un 20%.
  • Se consiguió un 80% de ocupación de la oficina con una ratio de puestos de trabajo de 1:1,3.
JLL Shanghai. WELL Platinum 2017

Landsec workplace

El edificio Landsec Workplace en Londres se certificó WELL Silver en 2017. Tras un año de uso, los principales cambios fueron los siguientes:

  • Aumento de la satisfacción con la calidad del aire en un 40%.
  • Aumento de la satisfacción con la iluminación en un 25% gracias al sistema de iluminación circadiana.
  • Aumento del 20% de la productividad.
Landsec workplace. WELL Silver 2017

En conclusión, los impactos de la certificación WELL no sólo son muy relevantes, sino que son perfectamente medibles en un plazo corto de tiempo. En los ejemplos que acabamos de mostrar los cambios se produjeron en el primer año de aplicación de las medidas enfocadas al bienestar.

Los resultados son, en definitiva, beneficiosos tanto para el propietario como para los ocupantes del edificio.

Noticias relacionadas

No se han encontrado resultados.
keyboard_arrow_up